
Por Fin, de vuelta a escribir aunque sea algo tonto e idiota, pero como ha pasado tiempo me da igual que sea lo que salga de esa ``espina clavada en mi lado izquierdo donde late mi fe, solo duele cuando rió, como indicándome que nunca seremos libres´´.
La historia:
De noche, paseaba la muerte en un barrio tranquilo, mientras esperaba el autobús, comenso a preguntarse si fuera posible vivir, que haría se dijo, pensó un instante, saldría todas las mañanas a pasear, a buscar la libertad que perdió el hombre hace mucho cuando aprendía de la vida, tal ves escriba algo murmuro, y en la oscura noche se asomo un viejo a su lado, -quien esta hay dijo la muerte-, el viejo espero un momento para toser y respondió a la impávida muerte, no sabes quien soy, no recuerdas mi voz, y la muerte asombrada dijo:
- ¿Que haces aquí?
Lo mismo que tu, trato de no estar solo.